¿Qué esperas del 2020?
Muchos de vosotros estaréis proyectando en estos días las metas e intenciones para el año que esta a punto de comenzar. Este desde luego es un ejercicio necesario para trazar un rumbo claro. Sin embargo hay ciertos puntos que debéis de tomar en consideración.
Antes de comenzar a trazarte estas metas para el 2020 asegúrate que estas persiguiendo tus deseos e intenciones y no los deseos e intenciones de otros. No es difícil que sin darte cuenta acabes trazándote las metas equivocadas, metas que no te van a aportar absolutamente nada.
No es difícil dejarse llevar por lo que la sociedad espera de ti o lo que tu familia espera de ti. Llega un momento que llegas a creer que son tus propios deseos e intenciones, sin darte cuenta que tu camino es otro.
Una casa mas grande, un coche mejor, mas dinero en la cuenta del banco, expandir tu negocio, unas vacaciones, adelgazar 20 kilos, mudarte a otra ciudad, acabar tus estudios, sean cual sean tus metas para el 2020 asegúrate que es lo que tu quieres de verdad no lo que la sociedad o tu familia espera de ti.
¿Qué te hace feliz?
¿Cuáles son tus sueños?
¿Cuáles son tus deseos?
No hay metas buenas o malas. Simplemente cada ser humano tenemos diferentes necesidades en las diferentes etapas que vivimos. Asociamos la felicidad con los logros materiales y en nuestro deseo por ser felices perseguimos mas logros materiales encontrándonos después de conseguir estos logros tan vacíos internamente como antes de conseguirlos.
Recuerda que la felicidad no esta en el exterior, sino dentro de ti. La felicidad es un estilo de vida, una decisión, una actitud. Espero que esta sea la primera de tus resoluciones para el 2020, tomar la decisión desde este momento de ser feliz, donde te encuentres hoy, con lo que tengas hoy, con quien eres hoy.
Los logros materiales son geniales, el dinero no tiene nada de malo. El dinero es energía como todo lo que te rodea. Todos los bienes materiales están ahí en abundancia, puesto que vivimos en un universo de abundancia para disfrutarlos, el problema surge cuando resultamos esclavos de estos bienes materiales y nos olvidamos de cultivar lo importante, nuestro interior.
Solamente tienes que dar un paseo por un cementerio para que recuerdes que nada material se ira contigo, ni siquiera tu cuerpo. Sin embargo lo que si ira contigo es el amor que hayas compartido, el crecimiento espiritual que hayas alcanzado en esta vida, las enseñanzas aprendidas, la compasión repartida a otros seres humanos.
Traza tus metas e intenciones con un verdadero propósito y no simplemente porque hay que tener una casa mas grande o mas dinero. Medita y tomate tu tiempo para establecer tus intenciones para asegurarte que son verdaderamente tus intenciones y no los deseos de tu ego. Existe una gran diferencia entre un propósito, una intención de tu Yo Superior que te traerá una felicidad inmensa, una alegría difícil de explicar con palabras y los deseos y caprichos del ego que te aportaran un momento efímero de vanidad y después vacío interno.
Es importante que cada una de tus metas tenga un propósito. Quieres una casa mas grande, ¿para que?, ¿Qué vas a hacer con esa casa mas grande?, ¿Esa casa mas grande es lo que tu verdaderamente deseas y te hace feliz? Ya todos sabemos lo que una casa mas grande le aporta a nuestro ego, la admiración y en muchos casos envidia de otros, pero lo importante es que te va a aportar a ti, a quien tú eres de verdad esa casa más grande.
Cualquier meta que traces con un verdadero propósito se materializara sin resistencia ninguna y te aportara riqueza no solo material, pero también emocional y espiritual.
Te deseo que el año 2020 te traiga mucha felicidad, paz, prosperidad y que todas tus intenciones se materialicen de una forma perfecta y en armonía para todo el mundo.